La contribución del sector vitivinícola a la economía, en términos de PIB y de empleo es relevante, como también lo es su aportación desde la perspectiva del desempeño del sector exterior, la dimensión social y la gestión de los retos en materia de sostenibilidad medioambiental. Sin embargo, esta importancia socioeconómica no siempre es conocida, al menos de forma suficiente. De ahí la oportunidad de llevar a cabo diferentes estudios sectoriales, elaborados por Analistas Financieros Internacionales (AFI) y promovidos por la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE).
Tras el estudio nacional encargado a Analistas Financieros Internacionales en 2020, OIVE ha iniciado un regionalización de esta acción con estudios por Comunidades Autónomas, como es el caso de Cataluña. OIVE trabaja de forma prioritaria en dar a conocer todo lo que hay detrás de una botella de vino y lo que aporta el conjunto del sector a la economía y sociedad.
Conclusiones del Estudio Importancia sector vitivinícola en Cataluña
- Cataluña cuenta con más de 56.089 hectáreas de viñedo, lo que representa el 5,9% del total nacional.
- Produce en torno a 3,2 millones de hectolitros de vino al año, un 8,4%del total nacional. Las provincias de Barcelona y Tarragona son las que concentran la mayor superficie de viñedo y volumen de producción de vino.
- Cataluña es la segunda región con mayor superficie de viñedo ecológico y con mayor porcentaje de hectáreas destinadas al cultivo ecológico (33% del total de la superficie; por detrás de Murcia). Y es la comunidad autónoma líder en cuanto a número de embotelladoras de producción ecológica con 273 bodegas y mostrando un crecimiento sostenido de las mismas.
- El sector vitivinícola aporta el 1,6% del PIB de Cataluña y ayuda a mantener y generar el 2% del empleo equivalente a tiempo completo: 61.350 empleos totales, incluyendo los efectos directo, indirecto e inducido.
- Cataluña es la segunda principal comunidad autónoma exportadora de productos vitivinícolas, ejerciendo una contribución positiva a la balanza comercial, con un superávit cercano a los 500 millones de euros anuales en promedio de los últimos cinco años.
- Un 2,3% de las empresas manufactureras catalanas se dedican a la elaboración de bebidas y cerca del 65% de las ventas al exterior de bebidas corresponden a vinos.