Las exportaciones de vino de España a Estados Unidos cerraron 2024 con un crecimiento del 7% en valor y volumen, consolidándose como uno de los principales proveedores del mercado estadounidense, según los datos de aduanas elaborados por la Interprofesional del Vino de España (OIVE).
España alcanzó un total de 391,4 millones de dólares en ventas y 67,3 millones de litros exportados, lo que la posiciona como el cuarto proveedor en valor y el séptimo en volumen. Para los vinos espumosos españoles, EEUU es el principal destino ya que según el interanual a noviembre 2024, se alcanzaron los 21 millones de litros (+7,7%) y 73,6 millones de euros (+9,6%). En cuanto a los vinos envasados no espumosos, España exportó 39,7 millones de litros en el interanual a noviembre 2024 (+2%) por un valor de 243,1 millones de euros (+4%).
Los datos, ante en un contexto de incertidumbre comercial debido a la posible imposición de aranceles por parte de EE.UU., confirman la fortaleza del sector vitivinícola español y su capacidad de adaptación en un entorno cambiante. En 2019, explica Begoña Olavarría, responsable de Inteligencia Económica de la Interprofesional, EE.UU. ya aplicó aranceles al vino envasado (no espumoso) a países europeos, entre ellos, España. No obstante, “mientras Francia sufrió una caída drástica en sus exportaciones, España mostró mayor resiliencia y logró mantener una posición estable en el mercado”.
Diciembre un mes de fuerte incremento en valor y volumen
Según los datos de la aduana de EE.UU. se observa un fuerte aumento de las exportaciones en diciembre (+23% en valor y +29,5% en volumen) lo que podría sugerir una posible estrategia de acopio por parte de los importadores estadounidenses, ante la incertidumbre generada por la amenaza de aranceles. Francia, con 2.506 millones de dólares (+0,3%) en valor e Italia, con 353,9 millones de litros (+6,1%) en volumen, son los primeros proveedores de vino a Estados Unidos. En este sentido, destaca la caída registrada por Nueva Zelanda, tercer proveedor en valor y quinto en volumen, así como de Australia, Canadá y, en menor medida, Alemania y Portugal. En la actualidad, con la posible reintroducción de medidas arancelarias, el sector vitivinícola español se enfrenta a una nueva etapa de incertidumbre. Sin embargo, los datos actuales reflejan una tendencia positiva que demuestra la capacidad del vino español para mantener y fortalecer su presencia en mercados estratégicos.
El objetivo, asegura la responsable de Inteligencia Económica, es continuar apostando por la calidad, la innovación y la promoción en EE.UU. para seguir consolidando su crecimiento. Para ello, la Interprofesional, seguirá trabajando en estrategias que permitan diversificar mercados, fortalecer la imagen del vino español y garantizar su competitividad internacional.
